martes, enero 23, 2007

El paradigma de los monos

Este paradigma me llegó por correo hace mil años, pero hoy me he acordado de él y como siempre Mr. google está ahí al pie del cañón.

El paradigma de los monos

Un grupo de científicos encerró a cinco monos en una jaula, en cuyo centro colocaron una escalera y, sobre ella, un montón de plátanos.
Cuando uno de los monos subía la escalera para agarrar los plátanos los científicos lanzaban un chorro de agua fría sobre los que se quedaban en el suelo.
Pasado algún tiempo, los monos aprendieron la relación entre la escalera y el agua, de modo que cuando un mono iba a subir la escalera, los otros lo molían a palos.
Después de haberse repetido varias veces la experiencia, ningún mono osaba subir la escalera, a pesar de la tentación de los plátanos.
Entonces, los científicos sustituyeron a uno de los monos por otro nuevo.
Lo primero que hizo el mono novato nada más ver los plátanos fue subir la escalera. Los otros, rápidamente, le bajaron y le pegaron antes de que saliera el agua fría sobre ellos.
Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo nunca más subió por la escalera.
Un segundo mono fue sustituido, y ocurrió lo mismo con el que entró en su lugar.
El primer sustituido participó con especial entusiasmo en la paliza al nuevo.
Un tercero fue cambiado, y se repitió el suceso.
El cuarto, y finalmente el quinto de los monos originales fueron sustituidos también por otros nuevos.
Los científicos se quedaron con un grupo de cinco monos que, a pesar de no haber recibido nunca una ducha de agua fría, continuaban golpeando a aquél que intentaba llegar hasta los plátanos.
Si fuera posible preguntar a alguno de ellos por qué pegaban con tanto ímpetu al que subía a por los plátanos, con certeza ésta sería la respuesta: «No lo sé. Aquí, las cosas siempre se han hecho así».

Moraleja: Este es un ejemplo que ilustra situaciones que se dan en muchos proyectos o departamentos en el mundo empresarial.

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2 Comments:

Blogger Tito Chinchan said...

Buenas,

grandísima historia esta de los monos, pero mayor aún es la verdad que encierra ;-)

Besitos a los tres.

24 enero, 2007 09:59  
Blogger anonymux said...

Me gustó por lo original y lo condenadamente cierta que es, ayer la comenté con unos compañeros y finalmente me decidí a buscarla y dejarla en el blog. Está empezando a ser un cajón de sastre de todo lo que se me pasa por la memoria, pero ¡que gustazo da poner lo que te de la gana! desahoga una barbaridad...

saludos

24 enero, 2007 22:21  

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