lunes, noviembre 28, 2005

Paseo por Azca

(...Domingo 20 de Febrero de 2005, una semana después del incendio del edificio Windsor...)

Esta tarde hemos bajado desde casa a la zona de Azca para echar un vistazo a la torre Windsor. La primera impresión que se tiene al verla es una mezcla de asombro, escalofrío y una pizca de morbosidad curiosa. Creo que saber que no hay victimas ni heridos hace que no se perciba el típico topico de "muerte y desolación" que normalmente rodea este tipo de sucesos. Por el contrario, es curioso el efecto de "visita turística" que se ha generado. Hay una multitud formada por visitantes esporádicos, turistas y familias de paseo dominical, que mezclados, pero caminando ordenadamente van siguiendo el "recorrido" perefectamente delimitado por las vallas y los agentes municipales.

Nosotros hemos bajado por la calle Orense y a la altura de la plazoleta del Corte Inglés hemos comenzado la "visita" (insisto en la sensación de "guiri" que teníamos, parecía que nos ibamos a encontrar al guía turístico, junto con el torno y la taquilla al doblar el Starbucks Cofee de Orense). Luego hemos retrocedido de nuevo a la calle Orense y hemos bajado hasta la esquina con Raimundo Fdez Villaverde.


Allí se agolpaba más la gente ya que acaba la "primera parte de la visita" (no es posible acercarse mucho más desde esta zona). La vista del edificio tan cerca con las impresionantes gruas que estan empezando a desplegarse, te saca un poco de las imágenes "de película" que estamos viendo en la televisión en los últimos días y te transmite sensación de cercanía ("si, esto ha pasado aqui mismo").

Luego hemos continuado alejándonos por la calle Agustín de Betancourt hasta la esquina con Rios Rosas y hemos doblado por la Castellana acercándonos de nuevo por detrás de Nuevos Ministerios. Es imposible salirse del itinerario, las cámaras fotográficas, sirven de indicadores. Al encarar la Castellana con Raimundo Fdez Villaverde con mucha más amplitud de horizonte, la vista del Windsor bajo el sol de la tarde y acompañado por las otras torres es de nuevo morbosa...

Para terminar el recorrido hemos vuelto hacia las inmediaciones del Corte Inglés y hemos entrado en el recinto peatonal que se acerca a la torre Picasso para echar un vistazo a la parte de atras desde nos hemos ido alejando hasta volver a salir a General Perón y de allí a casa.

Pasear con curiosidad y expectación por un lugar donde he transitado cientos de veces ha sido de lo más extraño.

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jueves, noviembre 24, 2005

Al acecho...

Siempre he pensado que está muy cerca... Esperando su momento...

Se que cualquier día notaré como me alcanza tras haber sentido su presencia tras mi espalda, que un aliento helado resoplará tras mi cuello y luego....

Muchas veces a lo largo de mi vida lo he pensado... Cuando era un crío y me levantaba solo de noche para ir al baño, sabía que no estaba solo, que "eso" me observaba y se movía siguiendo mis pasos hasta mi cama...

O cuando iba al jugar al escondite en el descampado cerca de mi casa. Para no ser descubierto, me arriesgaba a internarme justo al límite de la oscuridad y entonces notaba su presencia... En la lejanía oía a mis amigos pero mientras tanto, a mi espalda no dejaba de sentir que estaba ahí, en silencio. Cuando el miedo me obligaba a salir de mi escondrijo y volver hacia la luz de la calle, era justo cuando mas miedo tenía, recuerdo que al alejarme de la oscuridad intentaba no girarme hacia atrás y observar por el rabillo del ojo pero algo me obligaba a mirar como la negrura extendía su tentaculos de sombra hacia mi. En aquellos momentos sentía terror mientras creía oir un siseo sordo que me seguía y que me provocába escalofríos...

Luego en las primeras acampadas de adolescencia cuando las chicas ya no estaban cerca y no había que hacerse el valiente, recuerdo esa mezcla de miedo y morbo al internarme en un bosque y volver con la linterna apuntando al suelo, viendo a lo lejos la hoguera donde mis amigos canturreaban. En aquellos días el terror era sustituido por una especie de tendencia suicida. Recuerdo que mientras caminaba desafiaba: "aqui está mi espalda, atrápame a ver que pasa, venga, cógeme..." pero al mismo tiempo el escalofrío seguía rodeandome...

Ahora con mas años encima, no adivino en donde puede estar, aunque se que sigue ahí, buscando alguna forma de mutar y acecharme desde una nueva forma... A partir de ahora tendrá que cambiar bastante para poder aterrorizarme pero no dudo que permanece rondando cerca, esperando su momento... Muy cerca...

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